De la vieja Usina y las lamparitas al uso de LED.

“El tiempo pasa y se nos va la vida” dice una canción y como tal, la vida pasa y cuando lo hace da paso al progreso y este se nota. El paso de los años deja su marca no solo en las arrugas de rostros de la tercera edad, también lo hace dando lugar a las innovaciones.

Pasamos de huella a camino, de chalas a zapatillas,  de carretas a autos, de la carta al WhatsApp, de la pila a batería, y más…  del candil a la vela, de la vela al farol, del farol a la lámpara… y de ahí en más todo lo que ilumina hace brillar a Las Lajas.

Seguramente el que recuerda sabrá del uso de la vieja usina que en horas necesarias era encendida y que Don Hugo Fix junto a Don Pedro Campos mantenían. Tanto así que para cambiar las lámparas del pueblo, una cada varios metros, Fix subía al tractorcito (hoy ubicado a la vera del Acceso San Martin frente al Museo Histórico y Regional “Doña Emilia Ondetti de Fix”) y subido a una escalera se aseguraba que hubiera luz.

Esta vieja Usina estuvo donde hoy es el corralón municipal y con un tanque australiano lleno de agua funcionaba con motor a combustión y propagaba energía hasta las 10 de la noche, luego hasta las 00 horas y a veces hasta las 2 de la madrugada. Todo un éxito para el momento.

Luego y por relatos de pobladores locales, siendo EPEN los primeros operarios que se recuerda son Sambueza, Vázquez, Vidal, Sobarzo y Cides que era encargado.

El memorioso viajara en las rutas de su memoria y vera en cada parada fugazmente las luminarias que antiguamente daban luz al pueblo, a las instituciones, a las casas. Observara en su regreso a la infancia o juventud quienes realizaban el mantenimiento constante de aquello tan importante para la época, y que brindaba un ratito de energía para surtir las pocas radios y más tarde los televisores a lámparas blanco y negro que juntaban familias y sobre todo niños mirando por la ventana.

Ayer parecía una utopía tener energía estable y constante, nuestras calles y casas alumbradas por tiempo determinado con horarios adaptados al uso necesario, ayer Agua y Energía, hoy EPEN, ayer las lámparas de distinta potencia en watts hoy LED.

La tecnología sumada al esfuerzo humano nos permite disfrutar de todo lo que el progreso viene ofreciendo y de lo que nos apropiamos. Vemos como el paso del tiempo nos lleva inevitablemente a dejar atrás aquello de lo que nos hemos valido como parte de nuestro diario vivir y da lugar a nuevas opciones, oportunidades de calidad de vida mejoradas. Tal el caso que hoy vemos como personal del EPEN y su recurso lleva a cabo la colocación de LED en un sector barrial lindero a la Ruta Nacional 242.

 

Permitámonos el recuerdo de quienes en su momento hicieron de Las Lajas un buen lugar para vivir con las comodidades existentes, y demos la bienvenida a nuestras vidas lo que en las grandes urbes ya es habitual, bienvenido el paso del tiempo que nos llevó de la Vieja Usina para las lámparas al uso de LED.